Las Etapas de la Crianza del Cerdo
100% Ibérico en Alba Romero
En Alba Romero, el cerdo ibérico es más que un simple animal; representa una rica tradición. Cada cerdo es cuidadosamente seleccionado y criado, manteniendo el legado y las cualidades distintivas de la raza ibérica. Viven en perfecta sintonía con el entorno, disfrutando de la Dehesa y alimentándose de bellotas, lo que aporta un sabor único a sus productos, como los deliciosos embutidos y jamones.
La calidad es fundamental en Alba Romero en cada etapa, desde la elección de los reproductores hasta el proceso de curación de los jamones.
La crianza del cerdo ibérico en Alba Romero es transmitida por generaciones. La Dehesa, un lugar de encinas, alcornoques y quejigos, proporciona el hábitat ideal para los cerdos, donde crecen y desarrollan su inconfundible sabor. Durante la Montanera, los cerdos se alimentan principalmente de bellotas, ganando la grasa que distingue al exquisito jamón ibérico de bellota.
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VARIEDADES DEL CERDO IBÉRICO
Cuando hablamos del cerdo ibérico lo conforman varias estirpes, todas ellas son reconocidas con sus matices como cerdo ibérico y las denominamos con distintos nombres como (Negro Lampiño, Entrepelado, colorado Retinto, Rubio Andaluz, Manchado de Jabugo o Torbiscal) la crianza es similar, pero puede tener ciertas diferencias en el desarrollo de su crianza, como ejemplo el Negro Lampiño es una raza autóctona que posee menor desarrollo corporal que el resto de estirpes y se caracteriza por su tamaño y escaso pelaje que dejan a la vista los numerosos pliegues en su piel.
En todas sus variantes el cerdo Ibérico es una animal extraordinario que posee unas patas finas y alargadas, un hocico largo y recio y una fisonomía que le permite adaptarse a cualquier terreno en todas las épocas del año y en especial a este terreno tan único al que llamamos Dehesa. Un paraíso único en el que el monte mediterráneo ofrece una abundante variedad y en el que nuestras encinas, alcornoques y quejigos nos deleitan con sus bellotas, el fruto más preciado para nuestros cerdos ibéricos. Este periodo se desarrolla entre los meses de septiembre a febrero dando lugar a “La Montanera” y en Alba Romero nuestros cerdos gozan de este privilegio 2 años alcanzando una mayor ingesta de bellotas y por lo tanto una mayor calidad en nuestros productos ibéricos de bellota.


Gracias a la Bellota la composición del cerdo ibérico concentra más de un 60% de ácido oleico, este ácido graso monoinsaturado es realmente beneficioso y recomendable para regular el colesterol, aumentando el colesterol bueno y reduciendo el malo, todo esto hace que tengamos un producto de la más alta calidad, en el Jamón Ibérico Alba Romero.
DESARROLLO DEL CERDO IBÉRICO
La vida del Cerdo Ibérico empieza con la cubrición de las hembras 100% Ibéricas por parte del macho 100% ibérico (los machos no siempre son puros) aunque en Jamones Alba Romero tenemos el compromiso de proteger la ganadería del cerdo 100% ibérico que es algo único en el mundo.
El periodo de gestación de las madres duran lo que llamamos el 333 ( 3 meses, 3 semanas y 3 días ) y seguidamente paren en torno a 8 crías que pesan entre 700 gramos y 1 kg cada una aproximadamente.
En la etapa de lactancia al cerdo ibérico se le denomina Lechón y partir de esta fase, cuando ya el lechón ha alcanzado al menos los 20kg terminará su lactancia y se produce el destete donde el cerdo aprende a comer cereales y piensos preparándolo para su próximo desarrollo y pueda pastar por la dehesa. En esta etapa su peso alcanzara los 30kg aproximadamente.
Comienza la esperada Montanera, la mejor etapa de la vida del cerdo 100% ibérico con la dehesa repleta de su alimento favorito, la Bellota. En esta etapa recorren a diario una distancia entre 12 -15 km buscando el preciado fruto y reponen aproximadamente el 50% de su peso final.